Ejercicio 1
1) Observar:
a. con qué tono de voz hablas a las diversas personas que encuentras,
b. y tú en qué actitud te pones: ¿neutral? ¿pasivo? ¿agresivo? o que mas?
2) Obsérvate a ti mismo nuevamente y evalúa:
a. si las actitudes y el tono de voz utilizados en las diversas situaciones examinadas fueron a su juicio adecuados para el momento que estaba viviendo,
b. y si no cuáles deberían haber sido para ser efectivos.
3) Ahora relaciona las actitudes y el tono de voz que usaste con aquellos que las usan en tu círculo familiar.
4) Una vez que hayas comprobado que (por ejemplo) el que soltaste y usaste es el modelo de conducta de tu madre (lo mismo aplica para tu padre, abuelo, tío…) hazte la siguiente pregunta: “Si en esos momentos yo no (como) mi madre y yo nos comunicamos pasivamente (por ejemplo), si yo hubiera (estado) allí con quien realmente soy, ¿qué hubiera pasado diferente a cómo fueron las cosas?”.
5) Una vez que entiendas qué hubiera pasado de otra manera, obsérvate en los momentos posteriores de comunicación y mira si todavía te sale la actitud de tu madre (o padre, o abuelo…) en la que estás pasivo y con voz de una víctima (por ejemplo).
6) Cuando lo notes, inmediatamente dite mentalmente "Esta es mi madre, yo no soy ella", y luego compórtate como has visto que hubiera sido útil hacerlo como alternativa, ya que estás ahí y creas lo queque te expresa, en vez de repetir tu madre.
7) Continúe el ejercicio hasta que se sienta bien, superando cualquier dificultad o molestia.
8) Es probable que observándote a ti mismo identifiques y descubras más actitudes: la de mamá, papá, abuelos, tíos, etc. Así que, una vez que hayas terminado el primer ejercicio, hazlo también sobre los otros modelos que hayas encontrado, enfrentándolos uno por uno.
También puede tomar nota de sus observaciones y cuánto entiende a medida que avanza en los ejercicios. Posteriormente podrás releer tus reflexiones y decisiones y así consolidar tu capacidad de cambiar tu modelo de conducta.